Dentro del sistema de suspensión, los amortiguadores del coche tienen un papel clave para el correcto funcionamiento del vehículo. Concretamente, esta pieza es esencial para la estabilidad y la seguridad de éste en las maniobras. En Audi cuidan todos los detalles y, como no podía ser menos, los amortiguadores ofrecen el mejor rendimiento para disfrutar de una conducción sinigual.
Los amortiguadores son uno de los componentes dentro de los sistemas de seguridad activa de tu coche. Se trata de un eje cromado que va anclado al coche y con dos tubos de acero. Su función principal es garantizar una óptima estabilidad, controlando y absorbiendo las vibraciones y los impactos que sufre el coche mientras circula. Gracias a ello, podrás gozar de cierto confort y comodidad a bordo.
Por otra parte, esta pieza junto con los neumáticos son los que hacen posible que el coche tenga una buena adherencia sobre el terreno y una eficiente distancia de frenado.
Ir con los amortiguadores en mal estado puede acarrear serios peligros en la conducción. En primer lugar, la pérdida de estabilidad, de adherencia o el aumento de la distancia de frenado. Asimismo, esto puede afectar a su vez en la dirección del vehículo. Por todo ello, te aconsejamos que prestes atención a algunos síntomas que pueden manifestarse mientras conduces.
En el caso de que sientas que el coche va dando pequeños botes o que tiene un comportamiento extraño en las curvas o en las frenadas, puede que el amortiguador esté estropeado. De igual manera si notas que el neumático se gasta de forma irregular.
Es importante que prestes atención a estas anomalías. Sin embargo, los profesionales recomiendan que revises los amortiguadores cada 20.000 kilómetros y una vez pasen los 60.000 kilómetros los sustituyas. Para ello, nada mejor que apostar por nuestros talleres oficiales de Audi. ¡Pide tu cita!